Para mí, una de las cosas más lindas que tiene Pippa es que, no importa tu título universitario o los lugares en el que hayas estado antes, mientras tengas la apertura, humildad y ganas de aprender, eres más que bienvenida :)
Cuando llegué a aquí, sabía poco y nada sobre el retail en general o sobre los negocios. Era un mundo completamente nuevo para mí. Y a pesar de todo esto, tuve un increíble recibimiento y un acompañamiento constante para desarrollar las habilidades que me permiten hacer mi trabajo hoy en día.
Suena muy loco, pero la formación que recibimos en nuestros primeros años, nos ayuda un montón y nos abre muchas puertas, pero al mismo tiempo nos limita y encajona bajo una etiqueta (¿o somos nosotros mismos los que nos encajonamos? 😱). Y si tuvimos malas experiencias, ¿nos vamos a quedar sólo con eso? ¡No! ¡Qué aburrido! 🤪
Hace ya un par de años, implementamos un plan educativo que consiste en juntarnos todo el equipo y todos los meses en la casa Pippa. Tomamos un rico desayuno y conversamos sobre todos esos temas que nadie te enseña en el colegio o en la universidad. Hemos aprendido sobre educación financiera, psicología, sobre mejores prácticas en la venta, cómo sacarle partido a tu closet, sobre colorimetría, meditación, “journaling”, trabajo en equipo, y montón de cosas más. Los resultados han sido increíblemente motivantes!!! 😊
No sólo hemos aprendido cosas para mejorar nuestro desempeño en el trabajo. Todas estas instancias también nos han servido para conocernos, compartir experiencias, para sentirnos parte de algo más grande y lo más importante, para crecer. Cada cierto tiempo nos repetimos el lema: de aquí debemos salir más grandes de cómo entramos. 🌱💚
Volviendo a cómo empecé esta columna, al entrar a trabajar a Pippa sabía que iba a aprender de moda. Obvio. Pero nunca pensé que esta experiencia venía con el regalo del desarrollo personal, social, profesional, intelectual, físico y espiritual. ❤️ ️ Qué bacán, ¿o no?